Barroco:
tendencia cultural del siglo XVII.
El barroco no es una tendencia
delimitada a un periodo de tiempo, todavía sigue en vigor.
II- TRADICION BARROCA DEL MUNDO NO HISPÁNICO
En Italia florece el barroco en el
siglo XVII y parte del XVIII según Jean Rousset.
Según Oswald Spengler y Albert Béguin
el barroco comienza en Alemania y se difunde primero en España y luego por toda
Europa.
Según Herbert Read el arte nórdico
acentúa siempre la expresión de estados espirituales mientras que el arte
clásico la explotación del material. Pero el arte italiano comienza a
representar estados espirituales aferrándose aún a su gusto material.
Eugenio d’Ors incluye a Francia en su
propio concepto intemporal del movimiento (expresión artística del absolutismo
y de la monarquía triunfante).
III- TRADICIÓN BARROCA DEL MUNDO HISPÁNICO
Helmut Hatzfeld afirma con vigor que
el florecimiento del barroco transcurrió en España, y que ha contribuido con
importantes obras barrocas a la literatura universal.
El barroco español es arte
Contrarreformista y el barroco americano es arte de contraconquista. El barroco
fue introducido en América como un instrumento de colonización, pero los
americanos lo convirtieron en un instrumento para manifestar su propia
identidad cultural.
Según Carmen Bustillo, el arte
precolombino es un factor importante que muestra la presencia del barroco
independiente del europeo.
Alejo Carpentier difunde la idea de
“América Barroca” ya que descubre una constante barroca en el arte de las
antiguas civilizaciones americanas. Los indios artesanos le añadieron al
barroquismo español el colorido, la imaginación y la proliferación de la forma.
Según Carpentier, el barroquismo nace
por la necesidad de “nombrar las cosas” americanas.
El mestizaje del lenguaje debido a la
incorporación en América de otros materiales lingüísticos, origina la tradición
fértil de la heterogeneidad de las literaturas americanas.
IV- LA ESTETICA NEOBARROCA DE LA NARRATIVA HISPANOAMERICANA
Severo Sarduy trata de establecer la
estética neobarroca en la base filosófica y cosmológica. Distingue tres
mecanismos de artificialización lingüística para señalarlos recursos del
barroco: sustitución, proliferación y condensación. Propone la parodia para
descodificar el sistema barroco y neobarroco que consiste
en la intertextualidad y la intratextualidad.
La nueva novela hispanoamericana se
divide en dos fases de neobarroco, en términos cronológicos y lingüísticos:
“Boom”: exhibe
el primer neobarroco. Su lenguaje fue un medio para “decir algo”.
“Postboom”:
segundo neobarroco. Su lenguaje se convierte en un fin en sí mismo “para
transformar la realidad lingüística misma de la narración”.
Pero las dos fórmulas del neobarroco
coinciden en demostrar un interés particular en el lenguaje.
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